El reinado de Felipe II es uno de los más estudiados por la importancia que tuvo en nuestro país y en Europa. De las numerosas formas posibles que existen para poder expresar un poder monárquico y político, Felipe II quien fue un gran mecenas utilizó el retrato de corte para defender y mantener el sistema político del cual formaba parte.[1] Los nuevos conocimientos relacionados con la importancia de la imagen como fuente primaria son la principal razón de querer llevar a cabo una revisión sobre las imágenes femeninas de la época, con la intención de arrojar nuevas interpretaciones, saber si estas trasmiten o no la misma historia que las fuentes escritas, si son complementarias o incluso en ocasiones contrarias.
Las fuentes escritas por su conservación atienden principalmente a correspondencia y materia legal, por lo que pueden pasar por alto aspectos que una imagen es capaz de trasmitir. Además, en el caso que nos ocupa, los retratos de corte o estado fueron realizados para trasmitir una idea muy clara de la monarquía española.
La aportación principal del presente artículo es centrar la atención en el foco femenino de la monarquía, que por norma general debido al papel histórico de la mujer ha sido menos estudiado y situar la imagen como una importante fuente histórica de conocimiento, ya que esta es en muchas ocasiones supeditada a las fuentes escritas…